El asteroide 2012 DA14 ya no amenaza con chocar contra la Tierra.

Como viene siendo habitual en los últimos tiempos, algunos aprovechan cualquier circunstancia para asustar a los demás. Tras esta noticia, cierta, se han vertido montones de titulares sensacionalistas aludiendo al Apocalipsis y demás. Se han mezclado realidad y ficción para darle mas color...enfín, lo de siempre. Lo mas prudente es analizar que hay de cierto en todo ello minuciosamente. Veamos :

El 22 de febrero pasado, un telescopio robot del Observatorio de Mallorca (OAM) detectó un pequeño asteroide, de unos 50 metros de diámetro. Al día siguiente, la Unión Astronómica Internacional confirmó el descubrimiento y, desde entonces, algunos observatorios de todo el mundo lo rastrean para conocer su órbita con la mayor precisión posible. En solo unos días ya se ha calculado que se acercará mucho a la Tierra el 15 de febrero de 2013, pero también se ha descartado, para alivio de todos, que colisione en esa ocasión con el planeta. Sin embargo, todavía queda por descartar que lo haga en pases futuros.

El asteroide potencialmente poco peligroso ha sido designado 2012 DA14 y se acercará a una distancia que ahora se calcula entre los 21.000 y los 25.000 kilómetros, algo menor que los casi 36.000 kilómetros de la órbita que ocupan los satélites geostacionarios. “Es una aproximación sin precedentes en la historia de la astronomía”, afirma Salvador Sánchez, director del observatorio. “Vendrá a una velocidad de siete kilómetros por segundo y está descartada ya la colisión”. El asteroide será visible desde la Tierra con simples prismáticos el año que viene.



Este cuerpo celeste es pequeño , dependiendo de la zona y circunstancias del impacto, podría causar algunos daños locales de consideración, pero no a escala global. Pero repetimos, no hay ninguna posibilidad de choque.
En promedio, un objeto del tamaño de un coche entrará en la atmósfera de la Tierra por lo menos una vez al año, produciendo una espectacular bola de fuego en el cielo. Cada 300 años uno del tamaño de un autobús. Y cada 2.000 años un objeto del tamaño de un campo de fútbol impactará la Tierra, causando importantes daños locales. Y luego, cada pocos millones de años, una roca con una circunferencia que se mide ya en kilómetros, chocará con el planeta produciendo efectos globales debastadores.
Podemos preguntarnos si la supervivencia de una especie inteligente en un planeta puede depender de que se desarrolle lo suficientemente rápido en ese intervalo para saber evitar los efectos de una destrucción global. Así que a espabilar y evolucionar en vez de entretenerse en primitivas y estúpidas rencillas con otros clanes.

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